Esta operación busca inyectar capital a la petrolera estatal para que pueda cumplir con su programa de recompra y pago de pasivos, en un contexto de creciente presión sobre las finanzas públicas.

La emisión, distribuida en vencimientos a 4, 8 y 12 años, se destinará tanto a fines generales del gobierno como a capitalizar a Pemex, que enfrenta una deuda superior a los 100,500 millones de dólares y vencimientos por 12,500 millones solo en 2026. La presidenta Claudia Sheinbaum ha admitido que la situación de Pemex es una “presión” para las finanzas del país, calificando la deuda heredada como “maldita y corrupta”. El Paquete Económico 2026 contempla una última transferencia federal a Pemex por 263.5 mil millones de pesos, con la expectativa de que la empresa “camine sola” a partir de 2027. Sin embargo, análisis de México Evalúa indican que, por primera vez, los ingresos petroleros netos del gobierno provenientes de Pemex serán negativos en 2026, con una pérdida neta de 31 mil millones de pesos. El director general de Pemex, Víctor Rodríguez Padilla, aseguró que la empresa pagará todos sus adeudos de 2024 y 2025, priorizando a pequeñas empresas en estados como Campeche y Veracruz. Afirmó que la estrategia de la petrolera ya no se enfoca en la exportación de crudo, sino en abastecer el Sistema Nacional de Refinación para el “servicio del pueblo de México”.