El fabricante de vehículos eléctricos entregó un total de 497,099 vehículos entre julio y septiembre, una cifra significativamente mayor a los 440,000 que esperaban los analistas.
Este resultado representa un récord para la compañía y rompe con tres meses consecutivos de descenso en las ventas.
El crecimiento fue impulsado en su totalidad por los Model 3 y Model Y, cuyas entregas aumentaron más del 9%, mientras que los modelos de gama alta (S, X y Cybertruck) experimentaron una caída interanual del 30%. Esto sugiere que la recuperación de Tesla se apoya en sus vehículos más accesibles, con precios inferiores a los 45,000 dólares en Estados Unidos. El repunte se produce en un contexto complejo para la empresa, que ha enfrentado una mayor competencia, especialmente de marcas chinas, y protestas vinculadas a las posturas políticas de su CEO, Elon Musk. Un factor que pudo haber impulsado las ventas en Estados Unidos fue la expiración de un crédito fiscal federal. A pesar del buen trimestre, la producción fue menor en comparación con el mismo periodo de 2024, con 469,796 vehículos fabricados.













