Esta práctica, vigente desde 1995, ha permitido a las instituciones financieras reducir su carga tributaria.

La propuesta de la Secretaría de Hacienda fue respaldada por la presidenta Claudia Sheinbaum, quien la calificó como “injusta”, al tratarse de una deuda privada convertida en pública. El subsecretario de Ingresos, Carlos Gabriel Lerma Cotera, apoyó la medida bajo el principio de “piso parejo”. El SAT enmarcó esta acción dentro de una estrategia más amplia contra la evasión fiscal, asegurando que no se otorgarán más condonaciones a grandes contribuyentes. La medida entraría en vigor en el ejercicio fiscal 2026 una vez aprobada por el Congreso.