Asimismo, la tasa para el tabaco se incrementa del 160% al 200%, y se establece un impuesto del 50% a los juegos con apuestas y sorteos en línea, y del 8% a los videojuegos con contenido violento. Una de las inclusiones más polémicas es el gravamen a los sueros orales que no cumplan con la fórmula recomendada por la Organización Mundial de la Salud. Por otro lado, la reforma al Código Fiscal de la Federación (CFF) busca combatir la evasión, principalmente el "huachicol fiscal" y las empresas "factureras". Para ello, otorga al Servicio de Administración Tributaria (SAT) la facultad de negar la inscripción en el RFC a personas morales si sus socios están vinculados a empresas fraudulentas, y le permite acceder en tiempo real a la información de plataformas digitales como Netflix o Tinder. La Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC) ha advertido que estos aumentos "agrava de manera desproporcionada el consumo familiar" y podrían llevar al cierre de miles de pequeños negocios.