Una vez que estos billetes lleguen a los bancos, serán clasificados como "Billetes en Proceso de Retiro" y depositados en el Banco Central para su eventual destrucción. La principal razón detrás de esta decisión es la eficiencia y durabilidad; Banxico ha señalado que el billete de 20 pesos, al ser de baja denominación, tiene un alto nivel de circulación y un desgaste rápido, con una vida útil de aproximadamente tres años.

En contraste, una moneda puede durar hasta 15 años.

Es importante aclarar que el billete conmemorativo de 20 pesos de la familia G, emitido en 2021 por el Bicentenario de la Consumación de la Independencia, no se ve afectado por esta medida y continuará circulando con normalidad, ya que cuenta con elementos de seguridad más avanzados y está fabricado con materiales más resistentes.