Un acuerdo entre el gobierno mexicano y la industria aseguradora, aprobado en la Cámara de Diputados, ha puesto fin a un litigio fiscal de cinco años por hasta 200 mil millones de pesos, pero analistas y organismos como el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF) advierten que la solución encarecerá las pólizas para los consumidores a partir de 2026. El conflicto se originó por una reinterpretación de la Ley del IVA hace tres años, que generó un adeudo fiscal que amenazaba con la quiebra de hasta un 30% del sector. El acuerdo, incluido en la Ley de Ingresos de la Federación 2026, otorga un estímulo fiscal que condona los adeudos pasados a cambio de que las aseguradoras paguen el IVA correspondiente a 2025 y se desistan de los juicios en curso. Sin embargo, la modificación clave es que a futuro las aseguradoras ya no podrán acreditar el IVA de servicios relacionados con siniestros (como reparaciones o comisiones) contra el IVA de otras líneas de negocio.
La presidenta del IMEF, Gabriela Gutiérrez, afirmó que “los asegurados sufrirán costos mayores y procesos más lentos”.
Expertos fiscales confirman el alza, aunque es prematuro estimar un porcentaje.
Por otro lado, analistas celebran que se evitó un "golpe sistémico" a la industria, calificando el acuerdo como un "ganar-ganar", pues el SAT recaudará entre 20 y 25 mil millones de pesos y se evita la salida de aseguradoras internacionales del país, algunas de las cuales ya habían iniciado arbitrajes internacionales contra el gobierno.
En resumenEl pacto fiscal entre el gobierno y las aseguradoras resuelve una disputa multimillonaria y previene una crisis sistémica en el sector. No obstante, al cambiar las reglas de acreditación del IVA, se prevé que las compañías trasladen el costo a los consumidores, lo que resultará en pólizas más caras y podría desincentivar la contratación de seguros en México.