Según Aldo Castrejón Gamiño, director de Asuntos Corporativos División México, uno de los beneficios más relevantes es la eliminación de las emisiones generadas por el transporte del gas, que actualmente se traslada desde Monterrey. Se estima que la planta, cuyo inicio de operaciones está previsto para abril de 2026, permitirá capturar hasta el 95% del CO2 utilizado en los procesos productivos. El presidente municipal de Toluca, Ricardo Moreno, celebró la inversión y reconoció la confianza de la compañía en la mano de obra local, afirmando que el proyecto generará más empleos directos e indirectos.

Este modelo de producción ya ha sido implementado con éxito por Coca-Cola FEMSA en otros países como Colombia, Venezuela y Brasil.

La iniciativa se alinea con la estrategia de innovación y sostenibilidad de la empresa, que busca hacer sus operaciones más responsables con el entorno. La directora de Desarrollo Económico de Toluca, Ana Yolanda Esquivel, destacó que el proyecto consolida una alianza estratégica entre el sector público y privado, impulsando una producción más limpia y eficiente en la región.