El fallo de este miércoles, aprobado por seis votos contra tres, revocó un amparo que un tribunal colegiado había concedido a Nueva Elektra.

La disputa se originó por el ejercicio fiscal de 2012, cuando la empresa declaró pérdidas fiscales mayores a las reales. La defensa de la compañía argumentaba que, bajo el régimen de consolidación fiscal entonces vigente, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) solo podía fiscalizar a la empresa controladora, Grupo Elektra. Sin embargo, la SCJN, con ponencia de la ministra Lenia Batres, estableció que el SAT sí tiene facultades para auditar de forma directa a las empresas individuales de un conglomerado. Las ministras Yasmín Esquivel y Loretta Ortiz, y el ministro Irving Espinosa, votaron en contra por considerar que el asunto no revestía un tema de constitucionalidad. Tras la decisión, Grupo Salinas emitió un comunicado en el que calificó a la Corte de “espuria e ilegítima” y acusó a los ministros de actuar “por consigna política, completamente en línea con el dictado de Palacio Nacional”. El grupo empresarial reiteró que estas decisiones “NO son definitivas” y que continuará defendiendo sus causas en “otras instancias nacionales e internacionales”.

Además, la Corte aplazó la discusión de otro caso relacionado con Totalplay, por un crédito fiscal de 645.7 millones de pesos.