Diversos reportes confirman que la bolsa total del evento asciende a 200 millones de dólares, de los cuales Canelo tiene garantizados 150 millones, mientras que Crawford recibirá 50 millones. Esta cifra convierte al combate en el más lucrativo de la trayectoria de Álvarez, superando con creces ganancias anteriores como los 100 millones que obtuvo contra William Scull o los 45 millones de su tercera pelea con Gennady Golovkin. Con este pago, Canelo se consolida como el deportista mexicano mejor pagado de la historia y se acerca a la élite de atletas multimillonarios como Floyd Mayweather Jr., cuya bolsa más grande fue de aproximadamente 220 millones de dólares contra Manny Pacquiao. El acuerdo forma parte del contrato que Álvarez firmó con el ministro árabe Turki Al-Sheikh, y las ganancias podrían aumentar con ingresos adicionales por venta de boletos y un bono extra en caso de noquear a su rival, según anunció Al-Sheikh. Antes de esta pelea, el patrimonio del tapatío se estimaba en alrededor de 600 millones de dólares, y con esta nueva bolsa, podría superar los 750 millones. Este monumental acuerdo subraya el poder de convocatoria de Canelo y su posición como una de las máximas estrellas del deporte mundial.