A nivel mundial, la transmisión exclusiva por Netflix alcanzó cifras sin precedentes.

Según datos de la plataforma, VideoAmp y Joe Hand Promotions, la disputa superó los 41.4 millones de espectadores globales, con un promedio por minuto de 36.6 millones y un pico de más de 24 millones de transmisiones simultáneas.

Este alcance masivo posicionó al combate como el evento número uno en Netflix en 30 países, incluyendo México y Estados Unidos, y se ubicó en el Top 10 en 91 naciones. El impacto mediático también fue notable, generando 21 de las 30 principales tendencias en redes sociales en Estados Unidos. Estos números subrayan no solo la magnitud del evento, sino también el éxito de la estrategia de promoción conjunta entre Riyadh Season, UFC y Netflix, que apostaron por una distribución global a través de una plataforma de streaming en lugar del tradicional pago por evento. Analistas como Renato Bermudez de ESPN señalaron que, a pesar del resultado, Canelo "sigue siendo la cara del deporte, porque maneja un marketing tremendo de mucho dinero".