Esta movida es significativa por varias razones.

Primero, porque reduce las probabilidades de que 'Canelo' obtenga una revancha directa, un camino que muchos campeones destronados suelen tomar. Segundo, porque pone a Crawford frente al rival que 'Canelo' ha sido acusado de evitar durante años, el llamado "Monstruo Mexicano". Si Crawford aceptara y venciera a Benavidez, reforzaría su legado de manera monumental, mientras que una victoria de Benavidez lo coronaría como el rey de la división. Para 'Canelo', este escenario lo deja en una posición de espera, observando cómo el nuevo campeón podría enfrentar al retador que él nunca concretó.