Figuras del boxeo, como Juan Manuel “Dinamita” Márquez, han sido enfáticas en señalar las deficiencias tácticas que se hicieron evidentes durante el combate.

Márquez, un reconocido analista, argumentó que a Canelo le faltó una esquina capaz de guiarlo para realizar los ajustes necesarios frente a un rival que dominaba el ritmo. “Le hizo falta un poquito de poderle decir: ‘No tires nada más golpes de poder, tira combinaciones.

Crawford te está golpeando, contragolpéalo también tú, tú lo sabes hacer bien’”, comentó Márquez.

Según su análisis, el equipo de Canelo pudo haberse confiado en que la ventaja de peso y los golpes de poder serían suficientes para asegurar la victoria, sin preparar un plan alternativo. Esta perspectiva sugiere que, mientras Crawford ejecutaba un plan de pelea meticulosamente estudiado, basado en las derrotas previas de Canelo, el tapatío se mostró incapaz de cambiar su enfoque cuando su estrategia inicial no dio resultados. La crítica no solo se centra en el desempeño de Álvarez en el ring, sino también en la labor de su esquina, liderada por Eddy Reynoso, cuestionando si contaban con las herramientas tácticas para descifrar el estilo de un boxeador tan versátil y técnico como Crawford.