y Dmitry Bivol, para construir su plan de pelea.

Esta preparación fue evidente en el ring, donde el estadounidense neutralizó el poder de Canelo y lo superó en técnica y velocidad.

El propio Crawford declaró después del combate que se sintió subestimado por quienes pensaban que sería noqueado, demostrando que su capacidad era superior. La victoria fue tan clara que el entrenador de Crawford, Bomac McIntyre, la calificó como una "tarea fácil", mientras que otros analistas, como Calvin Ford, señalaron que Álvarez "nunca supo cómo descifrarlo". La derrota generó una ola de reacciones en el mundo del boxeo; por ejemplo, Julio César Chávez Jr. confesó haber sentido un profundo dolor por la caída de su compatriota. Este enfrentamiento ha sido catalogado como un hito que redefine el panorama actual del boxeo y obliga a una reevaluación del legado y la posición de Canelo en la élite del deporte.