En su análisis, Márquez señaló que el plan del tapatío se basó excesivamente en buscar golpes de poder, sin variar con combinaciones. "Le hizo falta un poquito de poderle decir: ‘No tires nada más golpes de poder, tira combinaciones.

Crawford te está golpeando, contragolpéalo también tú’", sentenció el ex campeón.

Esta percepción fue confirmada desde la esquina contraria.

El entrenador de Crawford, Bomac McIntyre, calificó el combate como una "tarea fácil", mientras que Calvin Ford, otro miembro de su equipo, aseguró que Canelo nunca pudo descifrar el estilo de su pupilo. El propio Terence Crawford reveló parte de su éxito al admitir que estudió a la perfección las únicas dos derrotas previas de Álvarez, contra Floyd Mayweather Jr.

y Dmitry Bivol, utilizando esas peleas como un manual para explotar las debilidades del mexicano.

En conjunto, las críticas apuntan a una noche de fallas tácticas significativas que facilitaron el trabajo de un Crawford superior.