Su evaluación se centra en la condición física de Canelo como un factor determinante en su bajo rendimiento frente a Terence Crawford. La contundente valoración de García, “Canelo Álvarez parecía agotado físicamente, no debió pelear contra Crawford, parecía quemado”, fue difundida por el medio especializado FightHype y tuvo eco en la prensa mexicana. Este comentario, proveniente de una figura respetada en el entorno del boxeo, aporta credibilidad a la teoría de que los problemas de Canelo en el combate fueron más de índole física que técnica. El uso del término “quemado” sugiere un posible estado de sobreentrenamiento, fatiga acumulada o incluso un declive en sus capacidades atléticas, lo que podría explicar su notablemente bajo volumen de golpes y su incapacidad para igualar el ritmo y la energía de Crawford. Esta perspectiva desvía parte del análisis de la brillantez de Crawford para centrarse también en las posibles deficiencias en la preparación o el estado actual de Canelo. El análisis de García refuerza lo que muchos observadores notaron durante la pelea: un Canelo más lento y con menos explosividad de lo habitual, lo que plantea interrogantes sobre su campamento de entrenamiento y su futuro en la élite del boxeo.