A lo largo de sus 20 años de carrera, Canelo Álvarez ha demostrado la misma disciplina que lo caracteriza en el ring para construir un "imperio empresarial".

Los reportes indican que sus inversiones abarcan diversos sectores, incluyendo moda, bienes raíces, producción cinematográfica y una línea de bebidas. Esta habilidad para los negocios lo ha consolidado como uno de los deportistas más influyentes del mundo, con una fortuna estimada en 750 millones de dólares según un artículo.

Su faceta familiar también ha ocupado un lugar central recientemente.

Tras su cirugía de codo, Álvarez compartió en redes sociales una fotografía en su hogar, recuperándose junto a sus hijas. La imagen, donde se le ve con una hija dormida en brazos y otra a su lado, fue descrita como un momento que transmite "calma y ternura", mostrando una vulnerabilidad poco común. El propio boxeador acompañó la publicación con el mensaje "Son mi mayor fuerza", subrayando el papel fundamental de su familia como sistema de apoyo, especialmente tras una derrota y durante un complejo proceso de rehabilitación. Estas dos facetas, la de astuto hombre de negocios y la de padre devoto, complementan su perfil de leyenda del boxeo.