Este resultado ha generado un intenso debate sobre su futuro y su posición en la élite del boxeo mundial. El combate, celebrado en el estadio Allegiant de Las Vegas, marcó un punto de inflexión en la carrera del tapatío. La victoria de Crawford no solo le arrebató los cinturones a Álvarez, sino que también desató una ola de análisis sobre el desempeño del mexicano. Brenie Davis, entrenador de Crawford, elogió a Canelo a pesar del resultado, afirmando: “Contra Canelo tienes que dar el 110% tan solo para salir tablas”, aunque subrayó que la preparación de su pupilo fue agotadora y clave para la victoria. Por su parte, el promotor de Jake Paul, Nakisa Bidarian, también destacó la manera en que Álvarez aceptó la derrota “sin poner excusas”. Otros boxeadores, como Xander Zayas, admitieron su sorpresa por el resultado, confesando que esperaban una pelea “más cerrada” y que no tenían mucha fe en que Crawford ganara, pero que este demostró por qué es uno de los mejores del mundo. La derrota ha colocado a Canelo en una encrucijada, obligándolo a planificar cuidadosamente sus próximos pasos para reivindicarse y mantener su relevancia como uno de los fenómenos deportivos más importantes de los últimos tiempos. Su legado y su impacto internacional son ahora analizados bajo la nueva luz de esta caída, que lo obliga a redefinir su estrategia para el cierre de su carrera.