El “Monstruo Mexicano” se muestra confiado en que el combate finalmente se materializará en 2026.

La insistencia de Benavídez por medirse a Canelo ha sido una constante en la división de peso supermediano. Los artículos mencionan que el peleador mexicoamericano mantiene su postura de buscar activamente este duelo, considerándolo el más grande y lucrativo que se puede hacer en la categoría. Según los reportes, Benavídez explicó que el enfrentamiento es algo que los fanáticos han esperado por mucho tiempo, lo que garantizaría un éxito comercial sin precedentes, capaz de romper récords de audiencia y taquilla. La confianza de Benavídez en que la pelea se concretará en 2026 sugiere que su equipo podría estar trabajando para alinear las condiciones necesarias para que el evento se lleve a cabo, una vez que Álvarez se recupere de su cirugía y cumpla con sus compromisos restantes. Este posible enfrentamiento es visto no solo como una prueba de fuego para Benavídez, sino también como un desafío definitorio para el legado de Canelo en la recta final de su carrera, enfrentando a un rival más joven, invicto y en plenitud de condiciones que ha sido señalado por muchos como su retador mandatorio natural.