El carisma, estilo agresivo y el respaldo popular que ha ganado el ‘Pitbull’ lo posicionan como un sucesor natural.

Lejos de sentir presión, Cruz ve esta expectativa como un impulso.

“Que se hable de mí como la próxima cara del boxeo mexicano cuando ‘Canelo’ (Ávarez) me ceda la antorcha me motiva enormemente”, declaró el boxeador capitalino a Fightnews. Sin embargo, aclaró que esta conversación no desvía su enfoque de sus objetivos inmediatos, como su próxima pelea contra Lamont Roach el 6 de diciembre. Cruz entiende que para consolidarse como el heredero, necesita no solo el apoyo del público, sino también resultados contundentes y una trayectoria ascendente.

“Me impulsa a buscar la perfección, pero eso no cambia mi objetivo.

Como siempre, quiero asegurarme de que los verdaderos ganadores sean los aficionados”, añadió.

Su mentalidad refleja la comprensión de que el estatus de ídolo se gana en el ring, pelea tras pelea. La popularidad de Cruz ha crecido exponencialmente, y su disposición a enfrentar grandes retos lo convierte en un favorito de los aficionados, quienes ven en él la garra y el corazón característicos del boxeo mexicano.