Los perpetradores incendiaron la biblioteca y dejaron pintas dirigidas a un grupo delictivo.
Durante la madrugada, sujetos desconocidos irrumpieron en las instalaciones del plantel educativo, donde causaron destrozos significativos. Los actos vandálicos incluyeron el incendio provocado en el área de la biblioteca, así como daños en la tienda escolar y la dirección general. Fuentes policiales informaron que en las paredes del inmueble se encontraron pintas con mensajes dirigidos a una organización criminal, lo que sugiere que el acto no fue un simple caso de vandalismo, sino una acción con la intención de enviar un mensaje en el marco de la disputa territorial entre grupos delictivos que afecta a la región de Culiacán. Este tipo de ataques a centros educativos representa una grave escalada en la violencia, ya que convierte espacios dedicados a la formación de jóvenes en escenarios de la llamada “narcoguerra”. El incidente no solo causa daños materiales y la pérdida de recursos educativos valiosos, como los libros de la biblioteca, sino que también genera un ambiente de miedo e incertidumbre entre la comunidad escolar, afectando directamente a estudiantes, maestros y padres de familia. Las autoridades correspondientes han iniciado una investigación para identificar a los responsables y determinar el contexto exacto de las amenazas.