Una serie de incidentes violentos en centros médicos de Culiacán ha obligado a las autoridades de salud a implementar medidas de seguridad más estrictas, como un nuevo sistema de credencialización en el Hospital General. Estos hechos, que incluyen agresiones a pacientes y personal, han puesto de manifiesto la vulnerabilidad del sector salud ante la crisis delictiva. La Secretaría de Salud de Sinaloa inició un proceso de credencialización para todo el personal del Hospital General IMSS-Bienestar de Culiacán. Las nuevas identificaciones contarán con hologramas de seguridad y un chip con tecnología NFC que permitirá verificar en tiempo real la información del trabajador, su profesión y área asignada.
Esta medida responde directamente a graves incidentes de seguridad. Uno de ellos fue la detención de una mujer que, vestida con uniforme médico, ingresó al hospital e inyectó una sustancia desconocida a un paciente herido de bala.
Posteriormente, una enfermera fue vinculada a proceso por este caso.
En otro suceso, un paciente fue asesinado a balazos dentro del mismo hospital por individuos que lograron escapar.
La violencia también ha afectado al personal fuera de las instalaciones, como lo demuestra el asesinato del jefe de farmacia del IMSS cerca de la clínica. Ante esta situación, se planea reforzar la vigilancia con la Guardia Nacional y habilitar un acceso único con sistema biométrico para el área de atención a pacientes con heridas de bala. Estas acciones buscan garantizar la seguridad de miles de trabajadores y pacientes en un entorno de alto riesgo.
En resumenLa infiltración del crimen y la violencia directa en los hospitales de Culiacán han forzado a las autoridades a implementar tecnologías de control de acceso y reforzar la seguridad. Estas medidas son una respuesta urgente para proteger tanto al personal de salud como a los pacientes, quienes se han convertido en blancos vulnerables en medio de la crisis de seguridad.