Horas después, y gracias a labores de inteligencia, se localizó un domicilio en el fraccionamiento Urbivilla del Cedro, al norte de la ciudad, donde se habían refugiado los presuntos responsables. Al arribar al lugar, el Grupo Interinstitucional, conformado por la Guardia Nacional, el Ejército Mexicano y la Fiscalía General del Estado, fue recibido con disparos.

Las fuerzas de seguridad repelieron la agresión, lo que derivó en un enfrentamiento que se prolongó por varios minutos.

El saldo final de esta segunda confrontación fue de cinco presuntos delincuentes abatidos. El secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, confirmó los hechos a través de redes sociales, informando además que un agente resultó herido pero se encuentra fuera de peligro. En el domicilio se aseguró un vehículo con características similares al utilizado en el primer ataque, así como armamento de uso exclusivo del Ejército.

Este evento se enmarca en lo que uno de los artículos denomina la "narcoguerra que azota a la entidad", subrayando la persistente crisis de seguridad que afecta a Culiacán.