La opinión, aunque no es jurídicamente vinculante, posee una gran “autoridad moral” y fue calificada como “muy importante y decisiva” por el Secretario General de la ONU, António Guterres. Un aspecto clave del dictamen fue el rechazo a las acusaciones de Israel contra la Agencia para los Refugiados Palestinos (UNRWA). La corte dictaminó que Israel “no ha fundamentado sus acusaciones” de que un número significativo de empleados de la agencia eran militantes de Hamás o participaron en actos terroristas. Esta conclusión llega después de que Israel prohibiera las actividades de la UNRWA en los territorios ocupados y atacara sus instalaciones bajo el pretexto de que servían como refugios para Hamás. El fallo de la CIJ proporciona un respaldo legal crucial para la continuidad de las operaciones de la UNRWA y otras agencias de la ONU en medio de una crisis humanitaria sin precedentes.