Sin embargo, estas medidas son consideradas insuficientes por algunos.

La relatora especial de la ONU, Francesca Albanese, calificó el acuerdo de alto el fuego impulsado por Estados Unidos como “absolutamente inadecuado”, argumentando que no aborda la raíz del problema, que describe como un “genocidio”. Albanese criticó a los países occidentales por su “largo historial de complicidad” al proporcionar apoyo militar y diplomático a Israel, afirmando que esto erosiona el sistema multilateral.

Estas diversas acciones, desde la ayuda directa hasta los pronunciamientos legales y las críticas de expertos, ponen de manifiesto la profunda preocupación internacional por la situación en Gaza.