Una serie de visitas de alto nivel de funcionarios estadounidenses a Israel, incluyendo al vicepresidente JD Vance y al secretario de Estado Marco Rubio, busca reforzar el precario alto el fuego en Gaza. La ofensiva diplomática se centra en supervisar el cumplimiento del acuerdo y abordar los complejos pasos siguientes, como el desarme de Hamás. La presencia en Israel del vicepresidente JD Vance, el secretario de Estado Marco Rubio, el enviado especial Steve Witkoff y el asesor Jared Kushner, subraya la urgencia de la administración Trump por asegurar el éxito de la tregua que entró en vigor el 10 de octubre. Vance reconoció que la implementación de las próximas fases del acuerdo “no será fácil”, destacando que la tarea de “desarmar a Hamás y reconstruir Gaza” será “muy, muy difícil”. Estas declaraciones reflejan la complejidad de una paz duradera, ya que Hamás ha considerado el desarme como una rendición.
A pesar del optimismo expresado por los funcionarios estadounidenses sobre la viabilidad del acuerdo, la relación con el gobierno israelí muestra matices.
El primer ministro Benjamín Netanyahu, aunque agradeció la colaboración, afirmó que Israel “no es un protectorado de Estados Unidos” y que “es el único que decidirá sobre su seguridad”. Esta declaración sugiere que, si bien la alianza es fuerte, Israel mantendrá su autonomía en decisiones críticas, una postura que podría generar fricciones a medida que avancen las negociaciones.
La diplomacia estadounidense también busca ampliar los Acuerdos de Abraham, normalizando relaciones entre Israel y más naciones árabes, un objetivo que Vance considera parte clave del plan de paz para Gaza.
En resumenLa intensa actividad diplomática de Estados Unidos en Israel, con visitas de su vicepresidente y secretario de Estado, evidencia la prioridad de Washington por estabilizar la tregua en Gaza. Sin embargo, enfrenta el desafío de alinear sus planes con la firme postura de Israel de mantener su autonomía en decisiones de seguridad, especialmente en lo que respecta al desarme de Hamás y el futuro de la región.