Según un artículo, los retrasos pueden extenderse de seis a siete meses, incluso para trámites de casa habitación, lo que genera frustración y afecta proyectos de construcción. En respuesta, la Seduso, dirigida por Fernando Gutiérrez, emitió un comunicado afirmando que al 30 de septiembre de 2025 se habían resuelto 331 licencias totales, de las cuales 76 corresponden a fraccionamientos.

La dependencia sostiene que "el avance proporcional a los meses transcurridos en 2025 es incluso mejor que el año 2024". Específicamente sobre licencias de construcción para casa habitación, reportaron 733 resueltas en el año y un tiempo promedio de respuesta de 30 días, siempre que no existan situaciones especiales de riesgo. La situación ha escalado al ámbito político, donde legisladoras de Movimiento Ciudadano, como Sandra Pámanes e Iraís Reyes, acusaron a la administración de Adrián de la Garza de tener el área de desarrollo urbano "sin rumbo" y exigieron cumplir las promesas de agilizar los procesos. Pámanes sugirió que ante la "sospecha de corrupción", el municipio debe explicar la parálisis en los trámites. La discrepancia entre la percepción ciudadana y los datos oficiales evidencia un problema de gestión y comunicación en una de las áreas más sensibles para el desarrollo económico y urbano de la ciudad.