La familia denunció que un promotor del circo les ofreció 5,000 pesos a cambio de firmar un deslinde de responsabilidades, propuesta que rechazaron.

"Mi hijo pequeño aún se despierta llorando, tiene miedo… sólo pedimos justicia", declaró Ramírez.

Tras el accidente, la Dirección de Protección Civil Municipal procedió a la clausura del establecimiento, denominado también 'Orrins Circus', tras detectar que operaba sin la anuencia municipal correspondiente y carecía de medidas de seguridad fundamentales, como botiquines de primeros auxilios y cableado en condiciones seguras. Para cuando la familia afectada denunció que la empresa se había ido sin indemnizarlos, el circo ya no se encontraba en la ubicación del accidente, mientras las autoridades continúan las investigaciones.