BBVA México señaló una contracción del 0.1% en el consumo privado y una caída del 6.4% en la inversión fija bruta a junio. A pesar de la mejora en el pronóstico, el área de Estudios Económicos de BBVA advirtió que sin una reforma fiscal estructural, la deuda pública podría alcanzar el 58% del PIB para 2030, lo que pondría en riesgo el grado de inversión del país. Esta situación encarecería el costo de financiamiento para el gobierno, las empresas y las familias. Por su parte, la OCDE también señaló que la ralentización económica por los aranceles de Donald Trump será menos violenta de lo anticipado, pero el crecimiento seguirá siendo modesto, proyectando un 1.3% para 2026. Estas previsiones, aunque más optimistas que las anteriores, reflejan un entorno de crecimiento limitado y desafíos estructurales para la economía mexicana.