Diputados del Partido Verde y del Partido del Trabajo presentaron una iniciativa para gravar las bebidas electrolíticas orales, argumentando que se comercializan como medicamentos para evadir impuestos a pesar de su alto contenido de azúcar. La propuesta, que busca homologar su tratamiento fiscal con el de los refrescos, podría generar una recaudación de más de 5 mil millones de pesos para el presupuesto de 2026. La iniciativa, retomada durante la comparecencia del secretario de Hacienda, Édgar Amador Zamora, señala que estas bebidas operan con registro sanitario de medicinas, lo que les permite gozar de una tasa 0% de IVA y eludir los sellos de advertencia de la NOM-051 sobre exceso de azúcares.
Según los legisladores, esto genera "ventajas competitivas indebidas" frente a otras bebidas azucaradas.
El diputado José Antonio López Ruiz del PT afirmó que una marca líder de electrolitos "tiene 3.5 veces más azúcar que otras bebidas, en EU paga impuestos y aquí en México no paga ni IVA ni IEPS". Los proponentes estiman que, en los últimos cinco años, se han dejado de recaudar alrededor de 9 mil millones de pesos en IVA y más de 3 mil millones en IEPS por este concepto. El secretario de Hacienda, Édgar Amador Zamora, se mostró abierto a la discusión, declarando: "Estamos tratando de homologar criterios en algunos bienes y servicios en los que hay disparidad, y creo que esta observación respecto de homologar otras bebidas azucaradas creo que sería armónico con este criterio".
La reforma propuesta busca que estas bebidas sean consideradas como saborizadas y, por tanto, sujetas al IEPS y al etiquetado frontal, contribuyendo a la salud pública y la equidad fiscal.
En resumenUna iniciativa legislativa busca aplicar impuestos a los electrolitos orales, actualmente exentos por ser considerados medicamentos. La medida, que cuenta con la apertura de la Secretaría de Hacienda, pretende recaudar más de 5 mil millones de pesos y corregir una presunta competencia desleal con otras bebidas azucaradas.