La presidenta Sheinbaum explicó que la estimación de 600 mil millones de pesos mencionada por la procuradora se refería a una declaración previa de un diputado y no a un cálculo oficial del gobierno. “Hasta no tener completa esta base de datos, no podemos saber si hay venta de combustible que no está contabilizada”, afirmó la mandataria. Para resolver esta incertidumbre, el gobierno federal está consolidando una base de datos unificada que integrará información de Pemex, Aduanas, SAT y la Secretaría de Energía. Este sistema, que estará listo a finales de octubre, permitirá la trazabilidad en tiempo real de los combustibles para determinar con precisión si el volumen vendido en el país corresponde a lo producido e importado legalmente, y así cuantificar el verdadero tamaño del contrabando.