Calificó el panorama como de “un optimismo razonable en la circunstancia más difícil que hemos enfrentado”. Por su parte, la presidenta Sheinbaum informó que de los 50 reclamos presentados por la administración de Donald Trump sobre barreras no arancelarias, solo quedan siete puntos pendientes por atender, lo que demuestra un avance significativo. “Estados Unidos sabe de la importancia de México para la fortaleza económica de América del Norte, entonces tenemos confianza en que se va a preservar el tratado”, declaró la mandataria. El contexto de estas negociaciones incluye la amenaza de aranceles por parte de Estados Unidos, donde México busca una reducción de la tasa del 25% al 12%. Ebrard señaló que la estrategia del gobierno es resolver la mayor cantidad de controversias antes de la revisión formal para limitar los puntos de fricción. En este nuevo proceso, el sector privado participará como un “brazo técnico” del gobierno, en sustitución del antiguo formato del “cuarto de junto”, según confirmó la Concamin.