La presidenta Claudia Sheinbaum atribuyó esta contracción a factores externos, principalmente “la incertidumbre relacionada con la situación de los aranceles” impuestos por Estados Unidos, particularmente en la industria automotriz.

Sin embargo, se mostró optimista, asegurando que “no es algo que se va a arrastrar hasta fin de año” y que los datos de empleo de septiembre sugieren una recuperación para el último trimestre. La Secretaría de Hacienda coincidió, mencionando un "contexto de incertidumbre comercial y cautela por parte de empresas y hogares", pero reafirmando que el país mantiene "fundamentos macroeconómicos sólidos". Organismos del sector privado, como el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (Ceesp), advirtieron que este resultado podría indicar un debilitamiento económico más profundo, influido por un entorno de negocios poco favorable, inseguridad y menor inversión. El diputado panista Héctor Saúl Téllez Hernández calificó la caída como un “fracaso rotundo de las políticas económicas del régimen morenista”.