La economía mexicana mostró señales de debilitamiento al registrar una contracción del 0.3% en el Producto Interno Bruto (PIB) durante el tercer trimestre de 2025. Esta es la primera variación anual negativa desde el primer trimestre de 2021, lastrada principalmente por una caída del 2.9% en el sector industrial. Según la Estimación Oportuna del INEGI, el retroceso trimestral también fue de 0.3% respecto al periodo inmediato anterior. El sector secundario, que incluye manufactura, construcción y minería, fue el más afectado con una caída trimestral de 1.5%. En contraste, el sector primario (agropecuario) creció un 3.2% y el terciario (servicios) avanzó un marginal 0.1%.
La presidenta Claudia Sheinbaum atribuyó esta contracción a factores externos, principalmente “la incertidumbre relacionada con la situación de los aranceles” impuestos por Estados Unidos, particularmente en la industria automotriz.
Sin embargo, se mostró optimista, asegurando que “no es algo que se va a arrastrar hasta fin de año” y que los datos de empleo de septiembre sugieren una recuperación para el último trimestre. La Secretaría de Hacienda coincidió, mencionando un "contexto de incertidumbre comercial y cautela por parte de empresas y hogares", pero reafirmando que el país mantiene "fundamentos macroeconómicos sólidos". Organismos del sector privado, como el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (Ceesp), advirtieron que este resultado podría indicar un debilitamiento económico más profundo, influido por un entorno de negocios poco favorable, inseguridad y menor inversión. El diputado panista Héctor Saúl Téllez Hernández calificó la caída como un “fracaso rotundo de las políticas económicas del régimen morenista”.
En resumenEl PIB de México cayó 0.3% en el tercer trimestre de 2025, marcando la primera contracción anual desde 2021, debido principalmente a la caída del sector industrial. Mientras el gobierno atribuye el retroceso a factores externos como los aranceles de EE. UU. y proyecta una recuperación, el sector privado y la oposición expresan preocupación por un posible debilitamiento estructural de la economía.