El dato del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) mostró una desaceleración con respecto al 3.76% de septiembre, manteniéndose por cuarta ocasión consecutiva dentro del rango objetivo del Banco de México (2% al 4%). Este comportamiento fue impulsado principalmente por la caída en los precios de productos agropecuarios clave como el aguacate (-10.52%), el huevo (-2.23%) y el pollo (-1.32%). No obstante, la inflación subyacente, considerada un mejor parámetro para medir la trayectoria de los precios a mediano plazo, se mantuvo sin cambios en 4.28% anual, acumulando seis meses por encima del 4%. Dentro de este componente, los servicios mostraron un alza mensual de 0.39%, impulsados por el transporte aéreo (11.29%) y los servicios turísticos (8.04%). El factor más disruptivo en el índice mensual fue el aumento del 17.65% en las tarifas de electricidad, debido a la conclusión del subsidio de verano en 18 ciudades. Analistas de Banamex, aunque reconocen el alivio temporal, anticipan que la inflación podría retomar una tendencia ascendente hacia finales de año, proyectando un cierre de 2025 en 3.9%, debido a los ajustes fiscales previstos para 2026.