Estas acciones, según la gobernadora Rocío Nahle, se lograron sin detener la inversión en áreas prioritarias como obra pública, seguridad y salud.
La administración estatal informó haber cubierto un pasivo global de 44 mil millones de pesos, de los cuales 30 mil millones correspondieron a un adeudo fiscal con el SAT que se arrastraba desde 2009, dejando la cuenta en cero.
Este pago se realizó en el marco del programa federal “Deudor Cumplido”, del cual Veracruz fue el único estado en cumplir al 100%.
Adicionalmente, se adelantaron pagos al ISSSTE por 14 mil millones de pesos, reduciendo la deuda con dicha institución de 25 mil a 11 mil millones. Como resultado de estas operaciones, la deuda total del estado disminuyó de 119 mil millones de pesos a una cifra que, según diferentes reportes, se sitúa entre 62 mil y 69 mil millones, lo que representa una reducción aproximada del 42%. La gobernadora Rocío Nahle García subrayó que esta disciplina financiera se aplicó sin sacrificar la inversión estratégica, destacando la adquisición de patrullas, el incremento salarial para policías y el fortalecimiento de programas sociales. Este saneamiento ha sido reconocido por calificadoras internacionales como Fitch Ratings, HR Ratings y Moody’s, que mejoraron la calificación crediticia de la entidad, citando el control del gasto y la disminución de pasivos.












