Entre los fallecidos se encuentra Erick Vicente Acevedo, el conductor de un microbús que es recordado como un héroe por su valentía al auxiliar a sus pasajeros. El incidente, ocurrido el 10 de septiembre, ha dejado una profunda herida en la comunidad, con un saldo que también incluye 19 personas hospitalizadas y 39 dadas de alta, según el último informe de la Secretaría de Salud de la Ciudad de México. La historia de Erick Vicente Acevedo, de 33 años, ha capturado la atención pública; testigos y su esposa relataron que, tras la fuga de gas, detuvo su unidad y, al percatarse de que algunos pasajeros estaban paralizados por el pánico, regresó para ayudarlos a evacuar justo antes de la explosión. Sufrió quemaduras en el 100% de su cuerpo y falleció tras nueve días de lucha en el Hospital Rubén Leñero.

Otras víctimas identificadas incluyen a varios estudiantes del IPN, como Giovani Martínez Llanos, y a María Salud Jaurrieta Molina.

La Fiscalía General de Justicia capitalina mantiene como principal línea de investigación el exceso de velocidad del conductor de la pipa, Fernando Soto Munguía, quien también falleció. Sin embargo, un video difundido posteriormente y testimonios de vecinos sobre la presencia de baches en la zona han puesto en duda esta versión. La magnitud de la tragedia se refleja también en historias como la de Alicia Matías Teodoro, la abuela que protegió con su cuerpo a su nieta Jazlyn, y el fallecimiento de “Esperancita”, una paloma rescatada con graves quemaduras.

Las autoridades han solicitado ayuda para localizar a los familiares de dos víctimas, un hombre fallecido identificado como Gilberto Aarón y una joven hospitalizada.