La versión oficial estadounidense indica que Villegas atropelló a un agente al intentar huir, lo que provocó que otro oficial le disparara.

Sin embargo, videos difundidos en redes sociales parecen contradecir esta narrativa, mostrando a Villegas siendo sacado a la fuerza de su vehículo y arrastrado por la calle después del tiroteo, ya visiblemente herido.

El Congreso de Michoacán también se ha sumado a la condena, exigiendo justicia y que el crimen no quede impune, destacando que los migrantes no deben ser tratados como criminales. La comunidad ha respondido con vigilias y la creación de un pequeño monumento en el lugar del suceso, mientras organizaciones de derechos humanos piden rendición de cuentas a las autoridades estadounidenses.