Según los informes, fue un vaquero de la zona quien descubrió el cadáver mientras buscaba una vaquilla extraviada. La víctima, un hombre de entre 35 y 45 años, se encontraba maniatado y envuelto en una lona de color azul. Además, presentaba huellas de tortura y quemaduras en parte de su cuerpo, lo que sugiere un alto grado de violencia.

Los responsables también intentaron ocultar el cuerpo cubriéndolo parcialmente con una puerta.

Al lugar acudieron elementos de la Policía Municipal, la Guardia Nacional y la Fiscalía General del Estado (FGE), quienes acordonaron la zona para iniciar las diligencias correspondientes. Personal de Servicios Periciales se encargó de recabar evidencias en la escena del crimen. El cuerpo fue trasladado en calidad de desconocido al Servicio Médico Forense (Semefo) para realizar la necropsia de ley y proceder con su identificación.

Las autoridades han iniciado una investigación para esclarecer el homicidio y dar con los responsables.