Según los reportes, Alejandro era perseguido por individuos armados cuando fue alcanzado por los disparos y cayó sin vida en el camellón.

El cuerpo quedó tendido en una zona de alto tráfico vehicular y peatonal, lo que generó pánico y una rápida respuesta de las autoridades. Agentes de la policía municipal acordonaron el área mientras peritos de la Fiscalía General del Estado realizaban el levantamiento de evidencias y el traslado del cuerpo al Servicio Médico Forense. Este homicidio, ocurrido en una de las principales arterias de la ciudad, se suma a una serie de eventos violentos que han sacudido a Culiacán, evidenciando la continua presencia y operación de grupos armados en la capital de Sinaloa.