Su cuerpo quedó tendido junto al vehículo, frente a un establecimiento de comida japonesa.

Los primeros en llegar a la escena fueron elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional, quienes solicitaron el apoyo de paramédicos de la Cruz Roja, los cuales solo pudieron confirmar el fallecimiento. Los responsables del homicidio huyeron del lugar antes de que las autoridades pudieran detenerlos. La zona fue acordonada por agentes de seguridad pública para que peritos de la Fiscalía General del Estado realizaran las diligencias correspondientes y el levantamiento del cuerpo. La descripción del joven, de complexión atlética y cabello largo, fue proporcionada en los reportes. Este asesinato de un menor de edad en un espacio público durante la noche de Halloween añade un elemento particularmente sombrío a la ya preocupante situación de seguridad en Culiacán, una ciudad donde la violencia armada se ha vuelto una constante y la juventud es especialmente vulnerable.