El gobernador Alfonso Durazo calificó el hecho como “un día triste para Sonora” y prometió apoyo integral a las familias afectadas. Tras el incidente, el secretario de Gobierno, Adolfo Salazar Razo, reveló que la tienda siniestrada operaba sin un programa interno de Protección Civil autorizado desde 2021. Como medida preventiva, se ordenó el cierre de las 68 sucursales de Waldo's en Sonora para realizar una revisión exhaustiva de sus protocolos de seguridad. La empresa Waldo's lamentó la tragedia y se comprometió a colaborar con las autoridades y a gestionar los recursos necesarios para apoyar a las familias de las víctimas.