Anteriormente, México solo reconocía a representantes diplomáticos.

La mandataria afirmó que la postura de México, en sintonía con la comunidad internacional, es que “pare este genocidio en Gaza”. Este pronunciamiento ha generado una reacción inmediata de la Embajada de Israel en México, la cual expresó que el reconocimiento unilateral “no contribuye a una paz duradera” y que este tipo de medidas envían “un mensaje preocupante a las organizaciones terroristas [...] que lo interpretan como una forma de respaldo”. Por su parte, la Embajada de Palestina en México agradeció a la presidenta “por llamar las cosas por su nombre”. Sheinbaum también mencionó que se ha planteado a la embajadora palestina la posibilidad de que México reciba a niños huérfanos por el conflicto. Con esta decisión, el gobierno mexicano se alinea con un creciente número de países que han reconocido al Estado palestino, consolidando una postura más activa en el conflicto de Medio Oriente.