Este hecho intensifica el escrutinio sobre una organización cuyo líder, Naasón Joaquín García, enfrenta procesos judiciales por abuso sexual en Estados Unidos.

El operativo, realizado en un campo de entrenamiento en los límites de Michoacán y Jalisco, resultó en el aseguramiento de armas de réplica, equipo táctico y un himnario de la iglesia.

Los detenidos, entre los que se encontraba un ciudadano estadounidense, afirmaron estar preparándose para defender a sus líderes y templos.

Ante estos hechos, la presidenta Sheinbaum fue clara: “Lo que hay que perseguir es el delito, eso es importante, y en todo caso hacer la revisión por parte de Secretaría de Gobernación”. La mandataria distinguió entre los miles de fieles “de buena voluntad” y las posibles actividades ilícitas de algunos miembros. En contraste, el senador de Morena, Emmanuel Reyes Carmona, quien es miembro de la iglesia, minimizó el incidente, calificándolo como una “caricatura” y una “broma de teatro” por tratarse de armas de juguete, y denunció una “discriminación religiosa desmedida”. El caso también involucra al exregidor de Xalapa, Silem García, exvocero de la iglesia, quien es buscado por la Interpol a petición de Estados Unidos por presuntamente encubrir los delitos de Naasón Joaquín García.