Andrés Manuel López Beltrán, hijo del expresidente y secretario de Organización de Morena, fue criticado por su estancia en un hotel de Tokio donde el desayuno buffet costaba 400 dólares. Otros casos incluyen al secretario de Educación, Mario Delgado Carrillo, visto en un hotel de lujo en Portugal, y al diputado Ricardo Monreal, comiendo en uno en España.

La presidenta Claudia Sheinbaum ha defendido el derecho de los funcionarios a tomar vacaciones con fondos personales, pero también ha hecho un llamado a la modestia, afirmando que "el poder es humildad". La analista política Vanessa Romero Rocha ha señalado una respuesta popular "tan furiosa y tan rotunda" que refleja un sentimiento de traición.

El escrutinio también ha recaído sobre el senador Adán Augusto López Hernández, quien reportó ingresos privados por casi 4.3 millones de dólares en dos años, y sobre el senador Gerardo Fernández Noroña, quien, a pesar de declararse sin dinero en 2021, recientemente adquirió una casa valuada en 650,000 dólares.

Fernández Noroña se defendió diciendo: "Yo no tengo ninguna obligación de ser austero.

Son las políticas públicas que son austeras".

Estas acciones contrastan con las directrices éticas del propio partido, que en mayo endureció sus reglas contra "signos de ostentación material".

La situación ha provocado que votantes como María Rodríguez, de Ciudad de México, cuestionen: "Andan viajando, bien vestidos, carros muy caros ¿y la pobreza extrema donde quedó?

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