Este llamado fue secundado por el coordinador de Morena en San Lázaro, Ricardo Monreal, quien aseguró que se respetarán los principios constitucionales.

La oposición, liderada por el PAN y el PRI, también condenó el transitorio, calificándolo como un “retroceso” y una “aberración jurídica”. El coordinador del PRI, Rubén Moreira, sostuvo que el partido tricolor votará “en contra de la minuta y de cualquier intento de darle retroactividad a miles de juicios de amparo en trámite”. Este episodio es visto por analistas como el primer gran enfrentamiento entre el poder de la presidenta Sheinbaum y la influencia del grupo leal a su antecesor, poniendo a prueba su capacidad para alinear a las bancadas de su partido con su agenda de gobierno y respeto a la legalidad.