A pesar de ser trasladada a un hospital, falleció a causa de las heridas. La Fiscalía General del Estado de Campeche confirmó el homicidio e inició una carpeta de investigación para esclarecer los hechos y dar con los responsables. Este asesinato ocurre en un contexto de indignación nacional por la violencia política, a tan solo unos días de la marcha de la “Generación Z”, motivada en gran parte por el homicidio del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo. El asesinato de la regidora se suma a una serie de atentados recientes contra autoridades municipales en diversas regiones, un fenómeno que ha encendido las alarmas del gobierno federal.

En los últimos doce meses, al menos diez alcaldes han sido asesinados en estados marcados por disputas territoriales y la presencia del crimen organizado.

El crimen contra Díaz Hernández, ocurrido apenas dos días después de una visita de la presidenta Claudia Sheinbaum a la localidad, pone de manifiesto la frágil seguridad de los representantes populares y el desafío que enfrenta el Estado para garantizar su protección, incluso en eventos de alto perfil.