La tendencia consiste en que los usuarios comparten una fotografía o video de un familiar, amigo o incluso una mascota que ha fallecido durante el último año. Las publicaciones van acompañadas de la frase “Es su primer día de muertos…” y una breve descripción de la personalidad del difunto, con el objetivo de presentarlo a la comunidad virtual y pedir que lo recuerden o acompañen simbólicamente en su viaje. Musicalizada con la canción “El latido de mi corazón” de la película *Coco* de Disney Pixar, la tendencia ha resonado profundamente, generando millones de visualizaciones y reacciones emotivas en toda Latinoamérica.
Los usuarios comparten detalles íntimos y conmovedores, como “Ella es mi abuelita, es muy platicadora, camina un poco despacio porque le duelen sus rodillas, no la dejen atrás” o “Él es mi papá, recuérdenle que tiene que cruzar porque es medio despistado”.
Este acto de memoria colectiva funciona como un proceso de duelo compartido, donde desconocidos se conectan a través de la pérdida y el deseo de mantener vivo el recuerdo de sus seres queridos. El fenómeno ilustra cómo las redes sociales pueden crear nuevos rituales que complementan las prácticas tradicionales, extendiendo el aspecto comunitario del Día de Muertos a un espacio virtual y global.






