Regularización de Autos 'Chocolate' se Extiende hasta 2026: Una Medida Social con Impacto en el Mercado Automotriz



El gobierno de México oficializó la ampliación del decreto para la regularización de vehículos usados de procedencia extranjera, conocidos como “autos chocolate”, extendiendo su vigencia hasta el 30 de noviembre de 2026. La medida, publicada en el Diario Oficial de la Federación (DOF), fue firmada por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, y el secretario de Hacienda, Édgar Amador.
El objetivo principal es proporcionar un marco regulatorio que otorgue certeza y seguridad jurídica tanto a los importadores como a los propietarios de estas unidades. Entre las justificaciones del gobierno se argumenta que el programa busca reducir las brechas de desigualdad al facilitar el acceso a un medio de transporte digno, proteger el patrimonio familiar y ordenar una situación ya existente, especialmente en la franja fronteriza norte del país. Según las autoridades, la regularización permite incorporar estos vehículos al padrón vehicular oficial, lo que mejora el control, la recaudación fiscal y permite que los autos accedan a seguros y verificaciones.
Parte de los ingresos generados se destinan a obras públicas locales.
El decreto está vinculado al Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), ya que solo permite la regularización de vehículos fabricados o ensamblados en Norteamérica.
Los importadores deben presentar una certificación que acredite el origen del vehículo para acceder al trato arancelario preferencial.
No obstante, México se reserva el derecho de impedir la importación de unidades con reporte de robo, restricciones de circulación o que no cumplan con las normativas ambientales y de seguridad vigentes. Esta política, que se implementó originalmente en 2011 y ha sido prorrogada en más de diez ocasiones, no está exenta de controversia. La Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA) se opone a la medida, argumentando que limita la venta de autos seminuevos y nuevos en el mercado formal, lo que debilita la renovación del parque vehicular. El presidente de la asociación, Guillermo Rosales, ha señalado los daños que esta política causa al sector y ha criticado la falta de datos oficiales sobre el número de autos regularizados en el último año.









