Noche Estelar de Prescott Impulsa a los Cowboys en un Emotivo Homenaje a Kneeland

Los Dallas Cowboys rompieron una racha de derrotas con una contundente victoria sobre los Las Vegas Raiders, en una noche marcada por la brillante actuación de su mariscal de campo, Dak Prescott, y un emotivo tributo a su fallecido compañero Marshawn Kneeland.

Con una ofensiva revitalizada, los Dallas Cowboys se impusieron 33-16 a los Las Vegas Raiders en el cierre de la Semana 11 de la NFL, poniendo fin a una racha de dos derrotas consecutivas. La figura del encuentro fue el mariscal de campo Dak Prescott, quien tuvo su mejor noche de la temporada al lanzar para 268 yardas y cuatro pases de touchdown, logrando un rating de 138.6. Sus pases de anotación fueron atrapados por CeeDee Lamb, Jake Ferguson, George Pickens y Ryan Flournoy.

Con este resultado, Dallas mejoró su récord a 4-5-1, mientras que los Raiders cayeron a 2-8, continuando su declive bajo el entrenador de primer año Pete Carroll. Aunque los Raiders abrieron el marcador con dos goles de campo de Daniel Carlson para una ventaja de 6-3, los Cowboys tomaron el control a partir del segundo cuarto y no volvieron a cederlo, llegando al medio tiempo con un marcador de 24-9. El ataque terrestre fue un factor clave para Dallas, acumulando 114 yardas, de las cuales 93 fueron aportadas por Javonte Williams. En contraste, Las Vegas tuvo serios problemas para mover el balón por tierra, terminando con solo 12 acarreos y 27 yardas en total. La defensiva de los Cowboys también tuvo una actuación destacada, capturando cuatro veces al mariscal rival, Geno Smith, y consiguiendo un safety en el último cuarto al detener a Ashton Jeanty en la zona de anotación. El partido tuvo un profundo componente emocional, ya que fue el primero para los Cowboys desde el fallecimiento del defensivo Marshawn Kneeland, de 24 años, por un aparente suicidio. El equipo rindió homenaje a su compañero con camisetas conmemorativas y un momento de silencio antes del inicio. El entrenador Brian Schottenheimer y el propietario Jerry Jones expresaron que el equipo jugó para honrar la memoria de Kneeland, canalizando la difícil situación en una de sus mejores actuaciones de la temporada para mantener vivas sus esperanzas de playoffs.