Fuego y Olvido: Las Explosiones que Marcan a México y Venezuela, desde Tragedias Históricas hasta Crisis Actuales



En el estado Anzoátegui, Venezuela, se registró una fuerte explosión seguida de un incendio en la planta petrolera Petrocedeño, una instalación vital del Complejo Petroquímico José Antonio Anzoátegui. Testigos reportaron haber escuchado una detonación antes de que el fuego se concentrara cerca de una torre de destilación. Inmediatamente, los equipos de emergencia acudieron al lugar y evacuaron a los trabajadores, aunque al momento de los informes, la estatal PDVSA no había emitido una versión oficial sobre la causa del siniestro ni confirmado la existencia de víctimas. La planta Petrocedeño, inaugurada en 1990, es crucial para la economía venezolana, ya que procesa crudo extrapesado de la Faja del Orinoco para su exportación. La instalación, que fue una empresa mixta hasta que PDVSA adquirió su totalidad en 2021, cuenta con un historial de incidentes, incluyendo uno que dejó un muerto y tres heridos en 2012 y otra explosión en 2013. Mientras tanto, en México, las consecuencias de estos desastres persisten. En León, a casi cuatro meses de una explosión por acumulación de gas en la calle Pakistán, los vecinos continúan viviendo entre escombros, ya que las viviendas dañadas no han sido reparadas por completo y el apoyo prometido por el municipio aún no tiene fecha de entrega. Este panorama de riesgo y desatención resuena con la conmemoración del 41 aniversario de la tragedia de San Juan Ixhuatepec (San Juanico), en Tlalnepantla, Estado de México. El 19 de noviembre de 1984, una fuga masiva de gas LP en una planta de PEMEX provocó una cadena de explosiones que arrasó la comunidad y causó la muerte de cientos de personas, marcando una de las peores catástrofes industriales en la historia del país.










