El Periodismo Bajo Asedio Global: Gaza y México Lideran las Zonas de Mayor Riesgo en 2025



Entre diciembre de 2024 y diciembre de 2025, un total de 67 periodistas fueron asesinados en el ejercicio de su profesión en veintidós países, lo que equivale a un asesinato cada cinco días. Aunque esta cifra es ligeramente superior a la del año anterior, se mantiene por debajo del récord de 142 muertes registrado en 2012.
Gaza se posicionó como el lugar más mortífero, concentrando el 43% de los asesinatos a nivel mundial.
En este territorio, 29 periodistas fueron asesinados por las fuerzas armadas israelíes.
RSF califica la situación como un escenario sin precedentes, destacando que desde el inicio del conflicto en octubre de 2023, más de 220 profesionales de los medios han perdido la vida en la Franja. México ocupa el segundo lugar como el país más peligroso, con nueve periodistas asesinados en 2025, la cifra más alta en los últimos tres años, atribuida principalmente al crimen organizado. La organización advierte sobre una "mexicanización" de la violencia en América Latina, región que, junto con el Caribe, concentra el 26% de los asesinatos de periodistas en el mundo. Otras zonas de alto riesgo incluyen Ucrania, donde tres periodistas murieron en ataques con drones, y Sudán, que experimenta un aumento de agresiones en medio de su conflicto armado. La violencia no se limita a los asesinatos; al 1 de diciembre de 2025, 503 periodistas se encontraban encarcelados en cuarenta y siete países.
China lidera la lista con 121 detenidos, seguida de Rusia con 48 y Myanmar con 47.
Además, 20 periodistas permanecen secuestrados, principalmente en Yemen, Siria y Malí, y 135 están desaparecidos, de los cuales 28 son de México.
Las agresiones físicas también son una constante, como en Ecuador, donde 55 periodistas fueron atacados durante protestas.
Finalmente, el informe subraya el creciente número de periodistas forzados al exilio debido a guerras y políticas represivas en países como Afganistán, Rusia y Bielorrusia. El Salvador muestra un deterioro acelerado, con una "ola de represión" bajo el gobierno de Nayib Bukele que ha obligado a numerosos comunicadores a abandonar el país.









